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miércoles, 13 de noviembre de 2013

Juan Cruz, libros y música en Periplo

En Noviembre ya, con el festival dedicado a Agatha Christie desarrollándose terminado en Puerto de la Cruz, el festival de cuentos de Los Silos en el horizonte cercano ...y el blog durmiendo el sueño de los justos (y de los vagos, me permito añadir :)
Tenía escrito algo sobre el primerizo e interesante Festival sobre literatura de viajes, Periplo. Contó con varios escritores consagrados como Javier Reverte, Juan Cruz Ruiz , Julio Llamazares (desconocía este autor, me libró de esta ignorancia mi querida AEB ) e  invitados potentes como el entretenido Ander Izaguirre o la reflexiva Ana Briongos. Amén de la música en las calles - muy divertida por cierto - y talleres (fotografía, blogs)

Adelante pues con lo que a vuelapluma tomé en la trasera del programa durante la charla de Juan Cruz Ruiz con el periodista Eduardo García Rojas, también algunas ideas que me suscitaron.Son frases e ideas que un grupo reducido - demasiado, para ser la ciudad natal del autor - escucha mientras anochece en el Puerto de la Cruz.


La pasada semana el final del pasado septiembre vió la primera edición del Festival Periplo.
Quizá es un indicio de que algo se mueve en la escena cultural del Puerto de la Cruz, más allá de bibliotecas faraónicas sin inaugurar o patrióticas embarcaciones de la virgen.

Juan Cruz, con voz sorda y verbo desinhibido se impone de forma apabullante sobre su entrevistador, a cargo de parcas presentaciones de escritores durante todo el festival y cada vez más pacato en intervenciones.
Viaje a las islas canarias,  título del libro que se presenta.
'No sé cómo hago mis libros' a la pregunta de si quería más o menos los libros hechos por encargo 'uno está en la vida no cumpliendo tareas sino aceptando azares' - una de esas frases colosales de J. Cruz Ruiz : me pregunto si las improvisa o bien rezuma o destila de anteriores discursos e ideas -
Memoria de personajes de su niñez : Jerónimo que lo introdujo en los libros (con un libro de María zambrano), nombra otros, entre ellos el del abogado 'de menos pleitos y más libros' de Tenerife. Lamento no recordarlo, cuánto han hecho por la literatura las vocaciones forzadas.
'Si no preguntas no sabes, si no expresas tu ignorancia no sabes' tras los viajes a Santa Cruz, por motivos de salud ...'yo reconstruía en mi memoria todo lo que había visto' - pensé inevitablemente en Funes el memorioso de J.L. Borges -
'El viaje es una manera perpetua de saber lo mismo creyendo que es nuevo'
A la pregunta ¿Qué redescubres al volver? responde : 'las personas'
Ana Briongos, sentada entre el público después de haber presentado su libro ¡Esto es Calcuta! sonreía al escuchar a J. Cruz, él le diría al final en off : 'hablé demasiado, soy un alegador, aquí se dice alegador'.
A la pregunta de si había tratado con más cariño a las islas menores y tras la respuesta afirmativa, añade: 'Debería escribir un libro sobre Gran Canaria y Tenerife de día' porque son inaprehensibles para mí'
Fui represaliado por el gobierno civil por escribir que en Santa Cruz podían percibirse escenas de miseria y de hambre. eso lo supe más tarde.
'Para leer los chicos que estudiábamos esperábamos a la madrugada cuando bajaba el consumo de los hoteles y nos aumentaba la intensidad de la luz'.
Recuerda la librería de viejo en Madrid Dédalus y el libro 'Viaje al godo' de Ignacio Aldecoa. Habla en términos muy elogiosos del mismo y de no saber si sigue siendo encontrable, él lo editó en su momento.Abriendo un paréntesis, podemos responder afirmativamente pues el dueño de Masilva sabía que lo tenía, como me comentó al vendérmelo dos días después.
Homenajea el libro de Humboldt (imagino que sería el homónimo Viaje a las islas Canarias), 'es poético más que una narración científica. 'Las islas son lugares con límites' parafraseando el libro 'lugares sin límites', dice.
Insisto en el contraste curioso entre el aplomo y la dicción 'misturada' de la pequeña figura de Juan Cruz y su presentador encorvado, tímido y muy leído, al parecer.
'El archipiélago como una 'entidad sentimental' y no patriótica', prosigue hablando para las apenas setenta personas que lo escuchan, enmarcado por un Chillida, la maqueta de un barco y una pieza de madera que no identifico.
Hablando de la antigua escuela donde hizo sustituciones en Punta brava, dice 'Me dio rabia ver que lugares públicos están destrozados' .Allí había almorzado en un italiano que 'hace muy bien el pescado'
'No tenemos el derecho a usar el adjetivo afortunadas para hablar de nosotros mismos. Tampoco de gente 10 ' tenemos una autocomplacencia en nuestro propios defectos.'Regocijo del pesimismo y del nihilismo' .
'En democracia todos tenemos la posibilidad de actuar por la colectividad'.