Ahora podemos...blasfemar

 Conocía a Luis Carandell en amables tertulias radiofónicas en los 90, con Julio César Iglesias. transmitía bonhomía y una sabiduría humilde que iba empapando la conversación sin enfangarla en inútiles lecciones magistrales.

Han llegado a mis manos por casualidad dos libros suyos de los que he dado buena cuenta.
Uno de ellos 'Madrid, años sesenta', el otro 'Habas contadas'.
Están llenos de jugosas anécdotas y de aguda y profunda visión de las situaciones y periodos históricos y personajes.Entre ellos he encontrado uno, para mí desconocido por completo hasta hace un mes y que acapara ahora tanta atención mediática : Manuela Carmena.

'Doña Manuela Carmena, juez de de San Lorenzo del Escorial en aquella época, había sido, si no la primera, una de las primeras mujeres que llegaron en España a la judicatura. Era persona conocida desde tiempo en los medios periodísticos españoles porque había pertenecido durante años, antes de ser juez, al famoso despacho de abogados de la calle de Atocha, de tan triste recuerdo. Revestida ahora de su autoridad, bajo el gran tapiz con las balanzas de la Justicia, se disponía a juzgar un supuesto delito de blasfemia promovido por el ministerio público.
Fui el último de los peritos en ser llamado para hacer mi expertizaje ...' 

Un juicio por blasfemia. Habas contadas. Luis Caradell

Hasta aquí puedo leer, solo les digo que la anécdota está llena de inteligencia, humor y calidad humana.Como casi todos los capítulos. Léanlo si pueden.

Funerales y revueltas políticas

A propósito de las revueltas de Baltimore, sabía que había leído cómo los entierros se pueden transformar con facilidad en revueltas políticas. He encontrado la cita del antropólogo Nigel Barley, al que recordarán por su divertidísimo 'el antropólogo inocente', en su más serio, pero cargado de riqueza y profundidad 'Bailando sobre la tumba'

Los funerales ocupan un lugar especial en las luchas políticas.Haciendo uso de la paradoja de la muerte, transforman la derrota en un triunfo. Los muertos se convierten en mártires, trofeos de la causa, prueba de su fuerza y, en la enrarecida atmósfera del funeral, el dolor se convierte en entusiasmo político.[...]
por algo temían las fuerzas de seguridad británicas los funerales del IRA más que los mítines y marchas de los republicanos.

Bailando sobre la tumba.Nigel Barley 

Escándalo en FIFA

Hace años, Eduardo Galeano lo anticipaba: el fútbol para los grandes negociantes es una oportunidad de hacer dinero, sujeta a corruptelas y trapicheos. No anduvo por las ramas para explicarlo.


¿Por qué los jugadores no pueden conocer las cuentas secretas de la opulenta multinacional del fútbol? Havelange calla, ocupado en otros menesteres, y Joseph Blatter, burócrata de la FIFA que jamás ha pateado una pelota pero anda en limusinas de ocho metros y con chófer negro, se limita a comentar: —El último astro argentino fue Di Stéfano.

[...]

Las Olimpíadas de Barcelona recibieron de la televisión en 1993, seiscientas treinta veces más dinero que las Olimíadas de Roma en 1960, cuando la transmisión sólo llegaba al ámbito nacional. Y a la hora de decidir cuáles serán las empresas anunciantes de cada torneo, tanto Havelange y Samaranch como la familia Dassler lo tienen claro: hay que elegir a las que pagan más.

Fútbol a sol y sombra.Eduardo Galeano

Aprovechen a leer al maestro