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martes, 17 de julio de 2007

Sólo para mayores de 18


Era inevitable.
Años atrás, una vez vistas las blancas velas desplegadas en la portada sobre el noble fondo azul de un mar imperioso yo ya sabía que antes o después lo leería.

Pero, como las cosas de la lectura siguen también un curso azaroso, a pesar de los pesares y de todo lo dicho sobre el asunto, la decisión no quedó decantada hasta ver una película : 'Master and commander' ; fue un catalizador, un retorno a creer en películas de corsarios caballerosos y exploradores infatigables, revivir horizontes amplios donde el confín del mundo era algo inimaginable por lejano y donde tantas veces fábula y tradición suplían a conocimiento y ciencia .

Finalmente, encontré una edición agradable para la lectura, lejos del inmanejable tamaño de los volúmenes originales de Edhasa que mi padre tenía en casa. (Excusas, en realidad, como siempre, quería comprármelos y tenerlos para mí sólo, mi tesoro ;)

Así pues encontré estas dos joyitas :

'La fragata Surprise' de Plaza y Janés en edición de bolsillo y lomo blando y 'Capitán de Mar y guerra' de Edhasa, también bolsillo, aunque en tapa dura y de un color rojo que me da un curioso aspecto de enfrascado en lecturas bíblicas cuando camino abstraído por la calle embarcado en las innumerables y pormenorizadísimas aventuras de Aubrey y Maturin.

Por cierto he de añadir que las páginas en internet de las dos editoriales son manifiestamente mejorables, sobre todo en las opciones de búsqueda : me asombra lo difícil que es encontrar un libro ya sea por autor, título o isbn y por supuesto no hablemos de la imagen de portada de los mismos .

Inmerso en esa festiva y febril alegría lectora que se da uno en verano - un poco tótum revolútum, lo reconozco - donde suelo alternar la ciencia ficción con la novela histórica, he disfrutado muchísimo con esta lectura desordenada puesto que la novela inicial de la saga, 'Master and Commander' en su idioma original, es la segunda mencionada que leo en estos momentos mientras que la primera ,'H. M. S. Surprise ' en su versión original, es la tercera .

A pesar de los remolinos de drizas, foques, estays, cangrejas, mostachos, obenques ... he conseguido no fachear demasiado en la lectura y tener una singladura de breves guiñadas con ayuda del conciso y no autorreferente ( por breve, imagino) diccionario de términos navales incluido al final de las dos obras.

Así pues, la terminología naval, lejos de alzarse como un impedimento de lectura, se ha mostrado como un grato descanso sonoro para el oído lector, poco acostumbrado al rudo y franco acento marinero.

Como decía al principio, es sorprendente el detalle con el que las maniobras son descritas y causa cierta perplejidad lo complejo de conseguir los movimientos deseados de la embarcación , máxime cuando dependen fuertemente de elementos externos como las condiciones del tiempo. (En este caso la típica conversación inglesa sobre el tiempo no es meramente ociosa )

Hay momentos de humor verdaderamente antológicos - aunque puedan acontecer en situaciones dramáticas - y no me resisto a poner uno, donde se puede observar el humor del escritor :

'A bordo de la Sophie, corbeta de su majestad, en alta mar: Señor, Le ruego tenga a bien formar consejo de guerra contra Isaac Wilson (marinero), [...] por haber cometido el perverso delito de sodomía con una cabra, en el establo, la noche del 16 de marzo...

-"Es extraño como la ley siempre insiste en la perversidad de la sodomía" observó Stephen "Aunque conozco por lo menos dos jueces que son pederastas, y también, por supuesto, abogados...¿Qué le pasará?"


-"¡Oh!, lo colgarán sin duda. Lo colgarán de un penol, y asistirán todos los barcos de la flota"


-"Esto me parece un poco excesivo"


-"¡Oh!, desde luego que lo es ! un aburrimiento infernal[...] la tripulación del Sophie convertida en el hazmerreír de todos.¿Por qué denuncian algo así? A la cabra hay que degollarla, eso es normal, y se le servirá a quienes lo han delatado"

-" No podría ud. desembarcarlos a los dos, en costas distintas, si así se lo exigen sus valores morales, y luego seguir navegando tan tranquilamente?"


-"Bien", dijo Jack, [...] "Tal vez no sería mala idea la que usted me propone.
¿Un poco de té?¿con leche?"


-"¿leche de cabra,señor?"


-"Bueno, supongo que sí"


-"Entonces mejor sin leche, gracias" '

Exquisito.

(No, no,... no me refería al té, me refería al sentido del humor)

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