En mi caso la favorita es holgazanear - o seguir holgazaneando para qué negarlo - pero aprovechar a hacerlo con un buen libro : nada de estas disipantes lecturas de ciencia-ficción , literatura bélica o novelitas de intriga evasiva... no,no,no ... se trata de retomar aquellos edificantes libros de divulgación científica devorados con ansiedad en pretéritos tiempos mozos, hoy tristes en mis estanterías.
No me puedo quejar sobre los últimos que he terminado pues han sido a cual mejor.



Con este libro he seguido el consejo de aquel amigo que me dijo haber terminado 'El otoño del patriarca' para atreverse con 'Cien años de soledad'. En este caso he terminado 'Viaje a las antípodas' antes de comenzarlo; el estilo desenfadado, lleno de guiños me ha cautivado. A diferencia del ejemplo, el segundo es aún mejor que el primero.
Es curioso, he comenzado con la intención de hablar sobre cómo no hacer divulgación y he terminado hablando de libros excelentes. Mi vocación lisonjeadora puede sobre la vis crítica, pero todo se andará...
No hay comentarios:
Publicar un comentario