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sábado, 16 de agosto de 2008

Tergiversa que algo queda

Me están gustando tanto los libros que leo este verano que curiosamente me he centrado en comentar las decepciones.

Y es que es terrible lo del niño con el pijama de rayas.

Podría criticar cómo está escrito pues el autor proclama haberlo acabado en dos días y se nota pero, como no estoy graduado en literatura comparativa o escritura creativa - ni siquiera en literatura avícola comparada - esto lo dejaré para gente más experta.


Me ha preocupado la nefanda deformación de los hechos del holocausto presentados a modo de fábula.
La pretensión llegar a emocionar lacrimosamente obviando el horror del más ignominioso acto humano - sí, sólo podía ser humano - de toda la historia conocida; un libro donde la pretensión de extinguir metódicamente a millones de personas se convierte por arte de magia edulcorada en una especie de juego de escondite entre dos niños.
Hemos cambiado la frase de los internos del campo 'de aquí sólo se sale por la chimenea' a la de 'aquí se entra por debajo de las rejas' - ¡¡¡para compartir juegos!!! -.

Por supuesto hay miles de detalles menores incongruentes pero no menos importantes : por ejemplo, uno de los actos de suprema maldad nazi en los campos era no ensuciarse las manos, poner de kapos, tal como describe por ejemplo Primo-Levi, a presos comunes, presos políticos e incluso judíos para dar latigazos y delatar a sus compañeros de reclusión, entre otras lindezas.
La maldad suprema y cínica de hacer participar al castigado del delito, algo tan horrible que sólo desde dentro se puede juzgar en su inimaginable medida.

Recuerdo del libro 'Escapar de Sobibor' que uno de los supervivientes declaraba que al hablar con alguien se quedaba con la pregunta ' ¿Quién habría sido él en sobibor?' .
Este enigma íntimo y último : cómo sería nuestra esencia verdadera enfrentados a una prueba definitiva, parafraseando a víKtor frankl .

Este libro no sólo no lo puedo recomendar, lo considero pernicioso para los niños, adolescentes y para todos aquellos carentes de alguna lectura previa de lo que sucedió en la shoah.

3 comentarios:

Joselu dijo...

Este libro lo han leído algunos alumnos de cuarto de ESO este curso pasado por recomendación mía. El relato es una fábula realmente increíble, pero que me recuerda en algún sentido la inverosímil película La vida es bella de Roberto Benigni. Son fábulas que no ahondan dramáticamente en su fondo. Creo que El niño del pijama a rayas no cumple con esas pretensiones, pero es estimable si no la tomamos como obra de referencia sobre el genocidio nazi. Los alumnos que la han leído se han quedado sorprendidos y les ha abierto, quizás, las ganas de saber algo más. Para los que sí sabemos sobre el horror del holocausto, tampoco es ofensiva. Sí, inverosímil, no te lo niego. Queda en pie esa amistad entre el niño judío y el hijo del comandante del campo, y la entrada juntos a la cámara de gas, en una escena que todavía queda en mí tras largos meses que hace que la leí. No la veo como una obra ilustrativa de la Shoa, pero sí como una fábula sobre la amsitad. No la veo negativa en absoluto para los nuevos lectores, les da ganas de saber más, te lo aseguro. Un cordial saludo. Gracias por tus recomendaciones.

wraitlito dijo...

Perdona por tardar tanto en responder.
Efectivamente, en mi centro también se ha leído y en mi caso lo hice por recomendación de otro profe.
Diferimos mucho en la opinión sobre el libro.
No entro en la simplona y plana estructura de la historia - con el manido recurso de la perspectiva del niño -, me disgusta profundamente el tema elegido para dar un pretendido dramatismo que queda torpemente edulcorado.
Sobre el mismo tema acabo de leer paradero desconocido. Es un libro en forma de diálogo epistolar que huye de sanguinolientas descripciones, simple y emotivo, con el valor añadido de datar de la época.Yo lo recomendaría.
Sé que las modas influyen, pero no deben ir ordenando nuestras lecturas.
Saludos.

wraitlito dijo...

Para que conste : después de este comentario he recomendado una alternativa a los compañeros de lengua.