Buscar este blog

miércoles, 16 de octubre de 2013

La infancia recuperada o cómo volver donde fuimos felices y volver a serlo

Tengo para mí que el amor de Savater por los libros es algo que se muestra de forma impúdica e ingenua, sin pretendidos alardes de sapiencia. Este hermoso libro lo confirma.
En esta jugosa obra presentada y dos veces prologada por su autor, la segunda de ellas con motivo de su reedición, encuentro el disfrute de la lectura primera de libros que nos cautivaron a todos tantos de pequeños : Robinson Crusoe, La isla del tesoro,Colmillo blanco, El mundo perdido y otros más de mayorcito como El señor de los anillos (sí, reconozco que me llegó tarde, a los 18 añitos) o El Aleph. También aparece la melancolía de las pasadas dichas primeras -dicha de la lectura y dicha en la lectura- vueltas a visitar y el análisis somero de algunas circunstancias de la vida y obra de los autores.
Y sin embargo, ni siquiera el maestro se libra de mirar hacia atrás de reojo y protegerse del aguacero de los lugares comunes. Huye de la santificación de los 'connoiseurs' de la literatura - en su mayor parte críticos de obras ajenas, añado - pero no puede evitar referirse a ellos muchas veces e incluso entrar en la refriega intentando refutar sus argumentos manidos. Y son estos los únicos momentos en que el libro se me ha hecho pesado, incluyendo las disquisiciones acerca de Borges y sus referencias, símbolos  y mitologías. Para mí ya de por sí el maestro creador del Aleph y de las bibliotecas infinitas es demasiado elevado en sus mensajes y artefactos indirectos para entenderlo por completo, pretender desmenuzarlo me pierde por senderos tortuosos del pensamiento y me supera.Pero es defecto mío, añado (yo tampoco soy inmune a resguardarme de críticas, como ven) Fragmentos deliciosos del libro no faltan, entre ellas las comparaciones ambiciosas :

'En otro punto - el lector ya lo intuye- se asemejan filosofía y novela detectivesca: ambos son géneros amenazados de extinción, al menos en su forma clásica. Ni los grandes sistemas ni los grandes detectives tienen futuro: se desconfía de las explicaciones demasiado ingeniosas'
La infancia recuperada. Fernando Savater

Y es que Savater no puede contenerse y solo es él mismo ingenuo,ardoroso y alegre cuando vuelve a los libros en sí e ignora la crítica literaria.
Vivir de nuevo las historias, redescubrir pasajes e ideas y desempolvar fresca la memoria lejana : qué más se puede pedir a un libro sobre libros.

No hay comentarios: