Me refiero a 'La ridícula idea de no volver a verte' de Rosa Montero.
¿Hay algún refugio, un lugar seguro contra la tremenda certidumbre de la muerte?
La linealidad de nuestro sentido del tiempo, característica propia de nuestra visión occidental según Nigel Barley y la fragilidad de la memoria, me atrevería a añadir, que otorga peso muy relativo a los acontecimientos según su distancia -temporal y emocional- hacen de nuestra vida y del tiempo algo que necesita un sentido, una dirección de avance, un motivo.
Probablemente no sea así en absoluto.
Me defiendo pues, de la noche solitaria, con estas palabras que tuve la fortuna de encontrar en una revista de ciencia hace ya algunos años :
'...para aquellos que creemos en la física esta separación entre pasado, presente y futuro no es más que una ilusión, por muy tenaz que sea'
A. Einstein, carta a los hijos de su amigo Michelle Besso , a su muerte.
2 comentarios:
Se ve que el tema está de moda, pues la última novela de Alejandro Gándara, 'Las puertas de la noche', también aborda la reflexión sobre el tránsito y la memoria.
Sabes que la autora me comentó que le gustó la entrada en twitter ...esto de poder hablar con los autores es un hallazgo.
(Procuraré hacerlo poquito para no bajarlos del pedestal).
Por cierto que empecé con R. Montero por recomendación tuya ;)
Saludos
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